En el 2003 el artista fue premiado por el Museo Municipal de Bellas Artes por esta obra.
En buenos Aires tambien hay stencil de bicicletas parecidas y muchos pensamos o nos dijeron que era por Pocho Lepratti, conocido como el Angel de la bicicleta.
Se genero una confusion, supongo que por las fechas similares, la gente pensaba que la bicicleta negra de Traverso era por Pocho, el Angel de la Bicicleta. Si bien las 350 originales de Rosario no lo eran, las que se siguieron reproduciendo en otras ciudades, si lo son.
El 19 de diciembre de 2001, Claudio pocho Lepratti trabajaba como auxiliar en una escuela humilde de Rosario. El presidente de la rua habia declarado estado de sitio y el pais era un calvario. Un movil policial paso por la escuela y empezo a los tiros, Pocho se subio al techo para pedir que no tiren porque solo habia chicos, el policia Esteban Velazquez le disparo con una Itaka con balas de plomo y Pocho murio en el lugar. Los 5 policias fueron procesados y se verifico que la escuela no estaba en una zona de enfretamientos.Si bien el auto policial tenian agujeros de bala, se comprobo que no tenian la trayectoria de disparos desde el techo. Ademas los policias intentaron encubrieron el asesinato, modificaron pruebas, falsificaron el libro de guardias, etc. Velazques fue condenado a 14 años de prision pero salio a los y ahora fue visto como militante del PRO.
Pocho tenia 35 años, había nacido en
concepción del Uruguay, pero decidió vivir en el barrio Ludueña para
trabajar con los más humildes. Coordinaba los talleres para niños, y
daba clases de teología en la escuelita del padre Edgardo Montaldo,
también trabajaba con el grupo de jóvenes ‘La Vagancia’. El miércoles 19
de diciembre, harto de que la policía dispare contra pibes y mujeres,
se subió a la terraza de la escuela Nro. 756 del Barrio Las Flores,
donde colaboraba con la preparación de la comida. Intentó parar la
represión, pero un policía del móvil Nº 2270 del comando radioeléctrico
de nuestra ciudad disparó directamente contra el cuerpo de Pocho. La
bala de plomo se alojó en la traquea y lo mató, llevándose a un
militante de la vida y a una persona que luchaba día a día por cambiar
las podredumbres de este mundo



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