Cárcel o bala


Cárcel o bala
es el nombre y el apellido
de un odio que se disfraza de justicia,
de discursos que promueven la violencia
como única bandera.

Fue inaugurado por un presidente
que no inauguró más que delirios,
espejismos de libertad,
fantasías vendidas como futuro,
mientras la realidad se pudre
en el fondo de un río de cloaca
que ya no se puede contener.

Y ellos…
militan.

Militan el hambre.
Militan el odio.
Militan la represión.
Militan la traición.
Militan negociados turbios
con sonrisa y escudo.

Militan el terrorismo verbal
como si fuera consigna de campaña.

"Yo soy judío y voy a liberar al pueblo judío desde aquí",
"El que las hace, las paga",
"La gente va a morir de hambre o decidirá cómo no morirse".

¿Y el pueblo?
Silenciado, cercado, despojado.

El odio se derrama
sobre todo aquello que no rinde cuentas al mercado,
que no conviene a los negocios de amigos,
a su tan amado país:
el ocupante de Palestina.

Pero nosotros no somos eso.

No somos enemigos de Irán.
No somos criminales.
No somos mataniños.
No somos antisemitas.

Somos argentinos.

Y sobre nuestro cuello
descansa el ajuste más grande
de la historia de la humanidad.

Así lo dice Calígula,
en sus delirios macabros.

Así se Libra hoy,
en suelo argentino,
una batalla que aún no termina.

Mabel Pappano Abraham
Legisladora MC
Frente Vocación Nacionalista

A los 23 días del mes de julio de 2025 en mi Distrito de General San Martín.

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